Emuladores VS Consolas Retro

 

Aquí entramos en un dilema muy habitual: ¿para qué comprar una consola de este tipo, cuando puedo utilizar uno de los cientos de emuladores disponibles en el mercado? Pues la respuesta es muy simple: su sencillez de uso. Y es que, cualquiera de las consolas Retro que encontrarás en este recopilador cuentan con un sistema muy sencillo, lo único que tienes que hacer es conectar y jugar.

En cambio, un emulador es bastante más complejo. Para empezar, te bajas el programa y pruebas a configurar los mandos con los que quieres jugar. ¿Qué consigues que funcionen sin problema alguno? Enhorabuena, ahora te toca convertir cada juego que tengas para poder utilizarlo en el ordenador. Sí, puedes descargarte ROM en un gran número de sitios web, el problema es que es ilegal. Y no solo eso, te puedes encontrar con virus ocultos en estos archivos. Así que, el riesgo es otro valor a tener en cuenta.

Viendo que una consola Retro ya viene con un buen número de juegos pre cargados, te incluye mandos para poder jugar directamente, además de su facilidad de uso, hacen que sea una excelente opción a tener en cuenta.  Y oye, que tener una versión mini de las consolas más emblemática de nuestra infancia, también es un punto a tener en cuenta.